La Ciudad de Buenos Aires será sede de una nueva edición del Festival Internacional de Cine de Derechos Humanos (FICDH) desde el 11 hasta el 18 de junio.

El evento cultural de proyección global, desde 1997 propone una mirada comprometida con las luchas sociales a través del lenguaje audiovisual.

En su 21ª edición, el Festival reafirma su carácter competitivo e internacional con más de 50 películas de 37 países y actividades especiales que se desplegarán en diversas sedes porteñas bajo el lema #AbriendoFronteras.

El FICDH se desarrollará en el Centro Cultural San Martín, la Alianza Francesa de Buenos Aires, FADU-UBA (Ciudad Universitaria) y el Teatro Empire, con funciones especiales en el Centro Cultural 25 de Mayo, el Cine Gaumont y la Fundación Rosa Luxemburgo. A lo largo de la semana, además de las proyecciones, habrá charlas con directores, encuentros con invitados internacionales y locales, talleres, funciones para escuelas y espacios de reflexión colectiva que promueven la interacción entre el público y las temáticas abordadas.

La apertura estará a cargo de No Other Land, una coproducción entre Palestina y Noruega dirigida por Basel Adra, Hamdan Ballal, Yuval Abraham y Rachel Szor, recientemente reconocida con premios en la Berlinale y el Premio Oscar al Mejor Documental 2025.

Una de las novedades destacadas de esta edición es el foco sobre Identidades Trans, que incluye títulos como Trans Memoria, de la directora sueco-francesa Victoria Verseau, y Solo Kim, cortometraje español que narra la historia de un adolescente en pleno proceso de afirmación identitaria. Este enfoque resalta el compromiso del festival con la diversidad de miradas y realidades en torno a los derechos humanos.

La programación nacional también aporta una fuerte carga emotiva y política. Películas como Éramos tan flacos, de Carlos Castro, y Un mundo recobrado, de Laura Bondarevsky, rescatan fragmentos de la historia reciente argentina a través de archivos, testimonios y una mirada íntima. Identidad, dirigida por Florencia Santucho y Rodrigo Vázquez-Salessi, ahonda en las secuelas de la última dictadura a través del caso de Daniel Santucho Navajas y Que el último día sea para nosotros, de Mariano Pozzi, ambientada en la Guerra de Malvinas, se presentará en avant-première antes de su estreno internacional. Por su parte, Todo documento de civilización, de Tatiana Mazú González, ofrece una propuesta experimental sobre el caso de Luciano Arruga, destacándose por su potencia política y estética.

La selección de películas se organizó en secciones temáticas como Pueblos Originarios, Infancia y Juventud, Migrantes, Miradas de Género, Panorama y Salud, e incluye cortos, mediometrajes y largometrajes de ficción, documental y experimental. También habrá focos especiales dedicados a Palestina y a las identidades trans, una función de cortos animados latinoamericanos y una ventana curada por ClimateCulture en alianza con el British Council. El 50% de las películas programadas fueron dirigidas por mujeres, subrayando la apuesta del FICDH por la equidad de género.

El festival contará con la presencia de destacadas figuras internacionales como la activista española Lucía Hellín Nistal y la cineasta italiana Claudia Brignone, gracias a la colaboración con la Embajada de España y el Instituto Italiano de Cultura. Además, se desarrollarán tres competencias oficiales: Largometrajes Internacionales, Corto y Mediometrajes Internacionales y Documentales Latinoamericanos, sumándose el Premio RAFMA “Edgardo `Pipo´ Bechara el Khoury” y una mención especial del público.

El FICDH es un proyecto cultural que invita a descubrir cómo el cine puede potenciar la conciencia y el compromiso con la defensa y promoción de los derechos humanos. Fundado por el Instituto Multimedia de Derechos Humanos (IMD), el festival es un espacio pensado para la visibilización y exhibición de producciones audiovisuales recientes con impacto social que promuevan la inclusión, la igualdad, la pluriculturalidad y el respeto por la diversidad.